Ataque ingles sobre Neuve Chapelle, 12 de marzo de 1915.
Viene de aquí:
Pero el avance de las unidades gurkas no tuvo consecuencias sobre el terreno, ya que las divisiones que protegían sus flancos no habian avanzado a la misma velocidad, y los gurkas corrían el riesgo de quedar aislados.
Como era normal, la orden de retirada llegó tarde a los gurkas, y los alemanes aprovecharon para volver a ocupar las posiciones que habían perdido días antes. A mediodía del día 12 de marzo, todos los gurkas habían vuelto al punto de partida para la ofensiva, y las ganancias territoriales aliadas en Neuve Chapelle se reducían a un saliente de 900 x 3000 metros.
La brigada Dehra Dun, perteneciente a la división Meerut, y la brigada Sirhind, de la división de Lahore, fueron trasladadas al sector de Bois de Biez, una zona boscosa situada al sur-este de Neuve Chapelle, donde iban a participar en una nueva ofensiva aliada.
Desafortunadamente, una absoluta falta de coordinación entre los cuarteles generales de ambas divisiones provocó que, mientras una brigada se lanzaba al asalto de las trincheras alemanas (brigada Sirhind), la otra (brigada Dehra Dun) se había puesto a cavar trincheras.
La confusión fue máxima cuando la brigada Sirhind, en retirada tras fracasar en el asalto a las trincheras alemanas, se topo en plena oscuridad con la brigada Dehra Dun, que había recibido la orden de ataque medía hora tarde y marchaba hacia el frente.
Ofensiva sobre Bois Du Biez.
El caos se vio acrecentado por la intervención de la artilleria alemana, que no podía dejar pasar la oportunidad de bombardear tal concentración de tropas aliadas.
El 20 de marzo, ambas brigadas gurkas fueron relevadas y enviadas a retaguardia.La brigada Sirhind, que había entrado en la batalla de Neuve Chapelle con 472 hombres,oficiales y soldados, marcho al merecido descanso con solo 177 hombres utiles. La brigada Dehra Dun, perdió el 60% de sus efectivos, entre muertos, heridos y desaparecidos.
Neuve Chapelle siguió siendo un objetivo primario para los aliados, y el 5 de mayo lanzaron una nueva ofensiva para tratar de capturar la colina de Aubers (en las extensas llanuras sobre las que se combatía en el frente occidental, cualquier elevación del terreno era un objetivo militar de primer orden, ya que su posesión garantiza muchos kilómetros de visibilidad).
En la operación, que se iba a llamar la batalla de Festubert, iban a participar los seis batallones gurkas presentes en Francia.En esa ocasión, los aliados iban a variar sus costumbres, y en vez de realizar un largo y continuado bombardeo sobre la línea defensiva alemana, se iba a producir un breve pero muy intenso bombardeo. Se esperaba que con esa nueva tactica, los alemanes se verian sorprendidos y no tendrían tiempo para reaccionar.
Trincheras aliadas en Mauquissart.Al fondo,la colina de Aubers.
Como era previsible, la nueva táctica falló, y el ataque fue un desastre, sobre todo para las unidades gurkas, que a pesar de estar pocas horas sobre el campo de batalla, tuvieron centenares de bajas.
El general sir James Willcocks, que comandaba el cuerpo hindú, afirmaría:
“He llegado al convencimiento que las mejores tropas a mi mando en Francia son los gurkas”.
Los gurkas que combatieron en Fancia combatirian mas tarde en las cálidas Palestina y Mesopotamia, donde su actuar fue incluso mejor que en las embarradas y frías trincheras del norte de Francia.Enviar al Cuerpo Hindú al frente occidental había sido un grave error, y las 21.000 bajas sufridas por el cuerpo hindú durante su estancia de 13 meses en Francia así lo atestiguan.
La reputación como excelentes soldados lograda por los gurkas en las horribles condiciones del frente occidental se iba a ver aumentada por su extraordinaria habilidad en los combates en la península de Gallipoli.
El general Sir Ian Hamilton ,al mando del cuerpo expedicionario aliado en Gallipoli, solicitaba al secretario de estado para la guerra, lord Kitchener, el envió de al menos tres batallones de gurkas.
Esos tres batallones iban a formar parte de la 29 brigada de infantería hindú en gallipoli, que se completaría meses después con la llegada de otro batallón de gurkas.
Gallipoli fue una de las más dramáticas campañas de la 1ª guerra mundial para los aliados, no solo por el gran número de bajas sufridas,tambien por que los aliados perdieron muchas oportunidades de progresar tras los desembarcos del 25 de abril de 1915.La falta de experiencia en operaciones combinadas afectó a todos los miembros del cuerpo expedicionario, desde sir Ian Hamilton hasta el ultimo soldado,pasando por jefes y oficiales.
La pobre utilización por parte de los aliados de su superior armada, y la lentitud en aprovechar las ventajas en determinados puntos de la línea del frente permitía a los turcos reagruparse y lanzar contraataque para reconquistar posiciones defensivas perdidas anteriormente.
Por ejemplo, un fuerte contingente de neozelandeses y australianos desembarcó en la denominada playa Y (más tarde conocida como ANZAC Cove).No encontró ninguna oposición por parte de los turcos, pero en vez de progresar tierra adentro, los soldados desembarcados se limitaron esperar órdenes durante horas.
ANZAC Cove,tras el desembarco aliado.
La primera unidad gurka en desembarcar en las playas de Gallipoli fue el primer batallón del 6º regimiento, comandada por el teniente coronel Charles Granville Bruce (que se haría famoso tras finalizar la guerra al encabezar dos expediciones al Everest).
El batallón desembarcó en cabo Helles, una zona relativamente tranquila, lo que no impidió que en los nueve primeros días en Gallipoli, antes de que ninguno de los gurkas pudiera disparar ni una sola vez contra el enemigo, el batallón tuviera dos muertos y 21 heridos.
El 9 de mayo la unidad fue trasladada al flanco izquierdo de la linea aliada. Y el 12 de mayo, a la unidad gurka se le encargó tomar un acantilado desde el que los turcos bombardeaban a placer varias de las playas de desembarco.
Se había intentado dos veces tomar el acantilado, pero las tropas británicas habían fracasado. Tras un cuidadoso reconocimiento y con el apoyo de los cañones de los buques de la Royal Navy, el coronel Bruce se puso a la cabeza de sus hombres.
Las dificultades eran grandes,los accesos a la parte superior del acantilado eran sumamente escarpados, y las zonas más llanas estaban batidas por la artillería y las ametralladoras turcas.
Pero más alla de las dificultades, los gurkas, a pesar de perder 18 muertos y 42 heridos en el asalto, lograron tomar el acantilado.
Días mas tarde, por orden del general Sir Ian Hamilton, el acantilado pasaría a llamarse “Gurkhas Bluff”, el Acantilado de los gurkas.