Friday, February 15, 2019

Colditz: OFLAG IV C. ( 10ª parte) ; "El espiritu de Colditz",( I )

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 Viene de aquí:


  A mediados de julio de 1943 llegaba al castillo de  Colditz el teniente británico Anthony Peter Roylance Rolt, procedente del Oflag VII-B en Eichstatt, en donde había estado a  punto de conseguir llegar a la frontera suiza tras uno de sus repetidos intentos de fuga de numerosos campos de prisioneros, desde que había sido capturado en Calais a finales de mayo de 1940 por integrantes de la 10ª division panzer.


  La llegada del teniente Rolt a Colditz causó sensación entre los oficiales  allí prisioneros, no tanto por su participación en numerosos intentos de fuga ,sino porque Tony Rolt era uno de los mejores pilotos de automovilismo de las Islas Británicas (aunque debido a varias infracciones de trafico se le retiraba la licencia de conducción en gran Bretaña a menudo, y se veía obligado  participar solamente en carreras en el continente).

 Tony Rolt.


  Muy pronto el teniente Rolt contactaba con otros tres hombres a los que había conocido en el Oflag VI B de Warburg.Tras haber sido enviados a Sagan, los tres hombres, Bill Goldfinch, Jack Best y Lorne Welch se habían puesto manos a la obra y habían construido muy rápidamente  un túnel junto a la alambrada y muy cercano a la superficie en el que cabían los tres. Tras entrar los tres en el túnel taparon el orificio de entrada y practicaron pequeños orificios para respirar en la tierra que les cubría.

 Bill Goldfinch,segundo por la izq., y Jack Best,segundo por la derecha,en Colditz.


  Permanecieron todo un día enterrados, y a la siguiente noche continuaron excavando hasta que lograron superar las alambradas. Consiguieron llegar hasta el rio Oder y robar una barca, pero equivocaron la dirección de la fuga y fueron capturados de nuevo y enviados a Colditz.


  Lorne Welch era un experto en fabricación y el pilotaje de planeadores, y no hizo falta muchas reuniones para que los 4 empezaran a forjar un plan de fuga, con Rolt al mando,Golfinch a cargo del diseño del aparato y Welch y Best se encargarian de la construccion.


 El teniente coronel William Todd, al mando del contingente  de oficiales britanicos en Coldlitz, fue informado del asunto, y tras consultar con el comité de fugas se autorizó el proyecto, con la condición de que cuando fuera terminado y la fuga se fuera a realizar, solo seria con su conocimiento y bajo su autoridad.


  El teniente coronel Todd estaba convencido que Alemania iba a perder la guerra, y en ese caso estaba convencido que los prisioneros no sobrevivirían, así que cualquier proyecto para llevar a cabo una fuga, por muy extravagante que fuera, debía llevarse a cabo para salvar el mayor número de vidas posibles. Y la llegada a Colditz del coronel Sterling, creador del SAS y líder del Long Range Desert Group, un grupo de  operaciones especiales, iba a permitir a los internos de Colditz formar un grupo de  auto-defensa para el momento en que los aliados llegaran a las cercanías de Colditz y los guardias alemanes tuvieran la tentacion de eliminar testigos molestos.


  Y el teniente coronel Todd pensaba utilizar el planeador para avisar a cualquier grupo de soldados aliados en las cercanías.


  Para construir el aparato se decidió utilizar el ático situado sobre la capilla, un lugar ya utilizado por los prisioneros para ocultar la radio. El ático estaba dividido en dos secciones horizontales, el ático “bajo”, y el ático “alto". En al ático alto se construyó una pared falsa  con tablas de madera escamoteadas de las camas de las habitaciones vacias, con una trampilla en la parte superior de la pared, a  la que solo se podia acceder con una escalera o con un hombre sobre los hombros de otro, y cada vez que se terminaba de utilizar la habitacion  se esparcía por el suelo una fina capa de arena, para detectar pisadas extrañas.

 El atico "alto".La linea blanca en el suelo indica en donde estaba instalada la pared falsa.


El ático “bajo” iba a ser utilizado para lanzar desde allí el planeador,abriendo un orificio en la pared.

 El atico "bajo".


  El diseño del planeador iba a ser  ,en principio, original de Bill Goldfinch, aunque un extraordinario descubrimiento en la biblioteca del castillo de  Colditz, a la que solo los oficiales prisioneros de más alto rango tenían acceso, cambió las opciones.


  Lo que los oficiales británicos encontraron en la biblioteca del castillo era el libro “Airframes II”, de Cecil Latimer Needham, todo un compendio sobre la construccion,el mantenimiento y la reparacion de fuselajes de los princales aviones británicos de la época.


  Muy poco tardo el capitán Goldfinch en tener en sus manos detallados dibujos de las ilustraciones y esquemas del libro. Con eso, y el extenso conocimiento que tenia Welch sobre el ultraligero y manejable Luton Buzzard II, se pusieron a  trabajar en el primer diseño.

 Lorne Welch.


  El objetivo iba a ser diseñar y construir un planeador que,despegando desde el ático sobre la capilla, consiquiera superar el rio Mulde y fuera capaz de aterrizar en una pequeña pradera de hierba situada a unos 500 metros al otro lado del rio.

 Pradera en la que debia aterrizar el planeador,vista desde el lugar del previsto despegue.


  El planeador debía tener una envergadura mínima de 10 metros, y con su tripulación prevista de dos hombres no  debería superar los 270 kilos. Según los cálculos realizados, lanzando el aparato desde el ático a una velocidad superior a 50 km/hora, el aparato sería capaz de tomar una corriente de aire favorable y llegar a su destino.

 Primer diseño de Bill Goldfinch.


  La construcción de  las más de 6000 piezas de madera que iban a  formar el fuselaje, algunas de ellas no más grandes que una cerilla, se iba a realizar en la habitación tras la pared falsa, por 4 personas a la vez en turnos de 2 horas. El sistema de vigilancia y alerta estaba compuesto por cuatro hombres, con uno de ellos colocado siempre en la puerta que daba acceso al ático con visión directa de los otros tres vigilante, situados en el patio de los prisioneros.


  Estos tres vigilantes disponía de tres botellas de vidrio .Cuando no había ningún alemán a la vista, cogían en sus manos una sola botella. Cuando algún guardia alemán se aproximaba a la zona en donde se trabajaba en el planeador y había que guardar silencio, se cogían dos botellas. Y cuando había peligro real de ser descubiertos, los vigilantes tomaban las tres tres botellas en sus manos.


  El primer problema técnico que se presentaba a los diseñadores del llamado “Spirit of Colditz” era como conseguir que despegase. Había que conseguir construir y mas tarde instalar, una plataforma de lanzamiento, en un determinado lugar que la luz de los reflectores no alcanzase y que permitiera el despegue del aparato evitando tejados, torres, etc


  Tras estudiar detenidamente la situación, el comité de expertos decidió que la rampa de madera para el lanzamiento debia tener 20 metros de largo por metro y medio de ancho, y debía ser construida en partes ,que se ensamblarían en el momento elegido para el lanzamiento.


  El  lugar elegido estaba situado junto al atico, y según el plan, la noche prevista para el lanzamiento se practicaría un orificio en al pared del atico, por el que ese extraería primero el fuselaje y después las alas.


Pero, ¿cuál iba a ser la propulsión para poner el planeador en el aire?


  Se decidió colocar el planeador sobre un carrito, unido a una cuerda que pasaba por una polea instalada al final de  la rampa de lanzamiento. Al otro lado de la cuerda, una bañera de hierro repleta hasta arriba de arena y escombros. Llegado el momento del lanzamiento, se arrojaría la bañera al vacio, unos 40 metros, que arrastraría a toda velocidad al carrito con el planeador, aportando la velocidad necesaria para poner al aparato en el aire.

 Primer boceto del metodo de lanzamiento.