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Con las tropas de Lépido acampadas frente a las murallas de Roma, el senado romano se vió en la tesitura de elegir. O ceder a las exigencias de Lépido, que buscaba un segundo periodo consular y quizás, perpetuarse en el poder, o arriesgarse a una nueva guerra civil.
El senado se decidió por la guerra, Lépido fue declarado enemigo publico y se nombro a Pompeyo legado del ejercito consular de Lutacio Catulus, el otro cónsul del año.
Era todo un honor para Pompeyo, ya que la posición de legado de un ejercito consular normalmente llevaba a conseguir una magistratura,cuando Pompeyo ni siquiera había sido cuestor, un cargo administrativo de menor grado.
Pompeyo no dudó, y se coloco del lado del senado, El cónsul Catulo se dirigió directamente sobre el ejercito de Lépido,mientras Pompeyo era enviado al norte, a lidiar con el ejercito de Marco Junio Bruto, que acababa de cruzar los Alpes desde la Galia Cisalpina y amenazaba con internarse en Italia.
En una breve batalla en las cercanías del campo de Marte, las tropas del cónsul Catulo derrotaban al ejercito de Lepido, que tuvo que retirarse primero hacia Etruria y desde allí navegó hacia Sardinia (Cerdeña), donde no tardaría en morir de un ataque cardiaco parece ser por que descubrió que su esposa le era infiel :
“Lépido, de resultas, huyó sin detención de la Italia, retirándose a Cerdeña, donde enfermó y murió de pesadumbre, no por el estado de los negocios, según dicen, sino por haber dado con un billete, por el que se enteró de cierta infidelidad de su mujer.”
Bruto había llegado con su ejercito a Mutina (actual Módena), donde fue acorralado por las tropas de Pompeyo. Pompeyo se reunió con Bruto, y le convenció que tenía muy pocas posibilidades de vencer, ya que no tenía apoyos en Italia.
Via Emilia,,que transcurria entre Piacenza y Rimini, a su paso por Mutina.
Bruto aceptó el argumento de Pompeyo, y estuvo de acuerdo en rendirse con la condición de que él y sus hombres recibirían un tratamiento razonable y se respetarían sus vidas.
Pompeyo aceptó las condiciones de Bruto y le permitió marchar con una escolta de caballería hasta una aldea a las orillas del Po,en donde no tardaría en quitarse la vida.
El ejercito que Lépido había llevado a Sardinia constaba de 53 cohortes (aproximadamente, 5 legiones y media ).Era un muy potente ejercito, y en los siguientes años los romanos conquistarían provincias enteras con menos legiones. La cuestión es quien iba a liderar esos hombres, y hacia donde inclinaría sus fuerzas. ¿Obedecerían al senado? ¿ se unirian a Sertorio ? ¿ se mantendrían en Sardinia?
Las legiones en Sardinia eran, por definicion, un ejército rebelde, y el senado no tenía ninguna posibilidad de ponerlo de nuevo bajo su control en un corto espacio de tiempo.
De hecho, el oficial de mayor rango de los rebeldes, Marco Perpenna Vento,era un aristócrata amigo de Cayo Mario, que tras haber sido condenado a muerte por Sila había partido al exilio, de donde lo habia recuperado Lepido.
Perpenna sabía lo que podía esperar de los silanos si se rendía, asi que decidio luchar.
Como primera opcion,decidio llevar la lucha a Liguria, al noroeste de Italia.La región, poco civilizada aun y repleta de tribus de belicosos montañeses solo tenía un punto de valor estratégico ,la vía que unía Roma con la Galia y los Pirineos. Si Perpenna ocupaba Liguria podría unir la Galia Cisalpina con Hispania, y cerraría el paso hacia la Galia a todo ejercito que surgiera del centro de Italia.
Liguria,en tiempos de la Republica romana.
La cuestión de a quien iba a enviar el senado romano contra los rebeldes en Liguria e Hispania no era fácil de decidir. Tras la salvaje guerra civil de pocos años atrás,pocos generales de prestigio quedaban con vida y los que quedaban no estaban dispuestos a arriesgarla de nuevo.
Así que el senado tuvo que echar mano de “nuevos talentos”, nobles miembros de familia caídas en desgracia que encontraron una oportunidad para prosperar gracias a la escasez de militares y magistrados de prestigio, como los miembros de la familia Julia, o Cicerón, o el propio Pompeyo, que llevaba meses acampado en las cercanías de Mutina, donde habia integrado en su ejercito a las legiones de Bruto.
Asi, el senado decidió invitar a Pompeyo a terminar con los rebeldes Sertorio y Perpenna, pero no lo nombraron procónsul, sino pro consolibus, un titulo por el que actuaria en nombre de los consules, que no estaban preparados para hacer el trabajo y según Plutarco,tampoco parecían tener ningún interés en hacerlo:
"Dícese que, preguntando uno entonces en el Senado, con admiración, a Filipo, si realmente era de sentir de que se enviase a Pompeyo por el cónsul, respondió: “Yo por el cónsul, no, sino por los cónsules”, dando a entender que ambos cónsules eran inútiles para el caso."
Plutarco,Vida de Pompeyo,Capitulo XVII
Para el senado romano era una jugada magistral. Si Sertorio o Perpenna terminaban con Pompeyo no sería un cónsul romano el que caería derrotado, y así también se quitarían de en medio a un cruel soldado con bastante desprecio por la autoridad senatorial y con el molesto habito de reclutar ejércitos sin orden expresa del senado, más leales al propio Pompeyo que a Roma.
Si Pompeyo no terminaba con Sertorio o Perpenna, al menos se debilitarían entre ellos, y entonces el senado enviaría a algún general mas apropiado y más manejable con un par de legiones para terminar el trabajo.
En cualquier caso, Pompeyo y su ejercito semi-regular saldría de Italia y marcharía a Hispania, donde su rudeza y genio militar podría complementar al tranquilo y experto Metelo Pio. Ambos ya se conocían y habían combatido juntos en las guerras contra Mario y sus seguidores:
“Prestóse a ello Metelo, y habiéndole escrito que fuese, desde luego que entró en la Galia empezó a ejecutar por sí brillantes hazañas, y fomentó y encendió otra vez en Metelo el carácter guerrero y resuelto que estaba ya apagado por la vejez, al modo que se dice que el metal derretido y liquidado a la lumbre, si se vacía sobre el compacto y frío, pone en él mayor encendimiento y calor que el mismo fuego.”
Plutarco, vida de Pompeyo, VIII.
Las noticias de la partida de Roma de las legiones de Pompeyo llegaron a Sardinia, a las tropas de Perpenna, que urgieron a este a marchar rápidamente a Hispania para unirse a Sertorio.
Pero Perpenna se opuso.Durante la guerra civil Perpenna había permanecido en Sicilia,donde había tratado a los sicilianos brutalmente.Pompeyo habia expulsado a Perpenna de Sicilia tras unas pocas escaramuzas,y lo había obligado a huir a Liguria.
Perpenna era un culto aristócrata de origen etrusco, con una familia muy unida a la magistratura de la republica, no en vano varios de sus antepasados habían sido cónsules, y cuando sus hombres le sugirieron que debía marchar a Hispania y ponerse bajo las ordenes de Sertorio,penso que seria una humillación.
Pero la ley de Roma esta vez estaba a favor de los soldados de Perpenna y de Sertorio.
Ambos, Perpenna y Sertorio, habían sido pretores cum imperio, es decir, con el derecho legal a dirigir ejércitos. (Esta norma había sido instaurada y reconocida por Cayo Mario, y los silanos la habían respetado).
Perpenna había sido legado consular y pretor en Sicilia, pero su rango era inferior al de Sertorio,proconsul en Hispania. Dado que Hispania era una provincia consular y Sicilia no lo era,Sertorio tendría el mando en Hispania,según las leyes romanas.
Perpenna era consciente de su rango inferior en caso de que se dirigiera a Hispania, y no le gustaba la idea. Pero cuando llególa noticia de que las tropas de Pompeyo habían cruzado los Alpes y se dirigian a Hispania, no tuvo opción.
Pompeyo había cruzado los Alpes a principios de primavera, aproximadamente a la altura de las nacientes del rio Rodano, en los Alpes Cocios.Para evitar a los siempre levantiscos guerreros de la tribu de los salluvii (de las cercanías de la actual Marsella, aprox.), Pompeyo ordenó construir una calzada a través del Passo Monginevro.
Oppidum de la Cloche,cerca de Marsella,capital de los salluvii.
Asi, además de superar el bloqueo de los guerreros salluvii,Pompeyo también evitó, aunque indavertidamente, chocar con las tropas de Perpenna, que se encontraban en la zona de Marsella tras abandonar Liguria,esperando la construccion de una flota que mas tarde los trasladaria hasta Emporion (Ampurias, ya en Hispania).
Emporion.