La historia del Celebrity abandonado.

El asunto va más o menos así: cuando mi esposa comenzó la universidad, mis suegros le regalaron un Chevrolet Celebrity "casi nuevo", debía tener menos de 10.000 km en ese momento aunque ya tenía unos 15 años encima para cuando eso, era un carro que su anterior dueño apenas usaba y a ellos les pareció una buena oportunidad, lo que no sabían es que:

1. Ella se iba del país por varios años al terminar la Universidad y el Celebrity iba a quedar abandonado.
2.  A mi esposa le interesa tanto el tema de los carros como a mí el fútbol.
3. Seamos sinceros, en el mundo automotriz ese trasto carro no iba a pasar al hall de la fama por su confiabilidad, ni por seguridad, ni por su eficiencia, ni por su diseño, ni por sus acabados, ni por su nivel de ingeniería, ni por su historia, ni por su legado... creo que ya entendieron mi punto.

Mi esposa se veía feliz cuando supo que el Celebrity se iba, al parecer no le tuvo mucho cariño.

Volvamos al presente, el Celebrity estaba abandonado en el garaje de los suegros, después de 7 años sin que se encendiera su motor, su función se limitaba a ser un pisapapeles gigante lleno de polvo, su interior se había convertido en el "cuarto de San Alejo", del tipo de -"¿Dónde guardamos la caja de herramientas?... dentro del Celebrity, ¿y la caja del televisor?... dentro del Celebrity"-, -"¿has visto la lijadora?... busca dentro del Celebrity"-. Así que este monumento a la mediocridad historia de los carros norteamericanos de finales de los 70 y principios de los 80 era más un problema que una solución, había que hacer algo y comenzó el brainstorming, o mejor dicho la lluvia de ideas:

Las dos primeras eran las más evidentes: -"arreglémoslo y de paso aprovechamos el 2.8 litros para ponerlo a correr cuartos de milla"- dije alguna vez, aunque el optimismo no me duró mucho, con 115 caballos ese motor de 2.8 litros tiene la potencia de un 1.6 litros, consume como la turbina de un Boeing 747 y tiene la confiabilidad de un Lada, eso y que la caja automática de tres velocidades no iba a colaborar mucho. -"Está bien, entonces solo arreglémoslo"-, pero después de tantos años quieto la batería estaba totalmente descargada, las llantas se habían desinflado, la gasolina se había deteriorado (con el tiempo la gasolina se va degradando debido al efecto de la oxidación, a la volatilidad y a la condensación de agua) y el aceite debía tener la misma capacidad de lubricación que la miel de abejas, se requería nuevo aceite de transmisión, líquido de frenos, desarmar el sistema de alimentación etc. Mi esposa se rindió cuando escuchó las dos primeras, no le tenía mucho aprecio al Celebrity... de haber sido un Corolla AE86 o un Serie 3 E30 yo hubiese derramado sangre sudor y lágrimas por arreglarlo, al Celebrity nunca lo conocí funcionando y por tanto ni le tenía valor sentimental.

Con 1450 kg de masa, en una época en que los carros apenas tenían equipamiento y no debían pasar pruebas de choque, comencé a sospechar si el interior estaba hecho de mármol y granito, una breve inspección confirmó que no.

La otra opción evidente: "chatarrizarlo", por cierto el término correcto designado por la Ley Colombiana es "desintegración física vehicular" o "desintegración total de un vehículo automotor"; peeero, (siempre hay un pero en mis historias), mi esposa soltó la noticia: -"pero es que nunca hicimos traspaso"-, bueno, le dije a mi esposa: -"fácil, buscamos al dueño y hacemos el traspaso"-, el plan parecía funcionar hasta que nos enteramos que su propietario original había fallecido varios años atrás, aquí parecía que el Celebrity se rehusaba a salir de nuestras vidas... y del garaje. Al respecto aquí van los requisitos exigidos en la resolución 646 de 2014 del Ministerio de Transporte para "chatarrizar" un carro (y lo que teníamos de esos requisitos):

"Artículo 11. Entrega de documentos del vehículo automotor a la desintegradora. Al momento de la entrega del automotor, el propietario del vehículo entregará a la desintegradora, los siguientes documentos:

1. Certificado expedido por la DIJIN, el cual deberá ser validado a través del sistema RUNT. No. X (Requiere cédula del propietario del vehículo).

2. Autorización suscrita por el propietario del vehículo para realizar la desintegración física total. No. X (Requiere cédula del propietario del vehículo).

3. Certificado de tradición del vehículo en el que conste que el mismo está libre de gravámenes o limitaciones a la propiedad, excepto que el gravamen o limitación provenga de deudas de impuestos del respectivo vehículo a desintegrar. Check ✔

4. Placas del vehículo automotor a desintegrar o denuncio por pérdida". Check ✔

Dos Check ✔ y dos No. X, esto no va bien para la desintegración del Celebrity por medios legales.

No se dejen engañar por la perilla, no era mecánico sino automático, tampoco tenía 5 velocidades, ni cuatro... ¡tres!

Que el propietario hubiese fallecido era un problema, sin embargo los impuestos estaban al día, juiciosamente se habían pagado durante tantos años que un amigo abogado con quien trabajo me dijo que había buenas probabilidades de solucionarlo y hacer el traspaso, pero que se iba a demorar, volvimos a un callejón sin salida.

La "lluvia de ideas" continuó, un primo dijo: -"Se parece al DeLorean de Volver al Futuro"-, así que pensamos -"¿Y si lo convertimos en un carro temático?" -, tentativo pero demasiado trabajo, y no se parecen tanto; luego un gran amigo me dijo: (léalo con acento Ocañero) - "Compa, cojamos mi CX-5, remolcás ese trasto y lo tirás por un barranco"- pero al comparar los 910 kg de capacidad de remolque recomendada de la CX-5 con los 1450 kg de masa del Celebrity, ya no pareció tan buena idea para la integridad estructural del monocasco de la Mazda, y después de sopesar las ventajas de deshacernos del Celebrity vs un comparendo ambiental, también pasamos de la idea del barranco.

Arriba: El DeLorean DMC-12 de la película "Volver al futuro", abajo: El Chevrolet Celebrity que quería seguir en el futuro.

Así pasaron los meses hasta que un día mi esposa llamó a un viejo amigo quien trabaja como especialista en vehículos de escenas para cine y televisión, él mostró interés en el viejo y desvencijado Celebrity, tal vez iban a recrear alguna escena de Los Magnificos y necesitaban algo de época, el caso es que ayer escuché una de esas frases que se queda de por vida: "amor, hoy se llevan el Celebrity", frase que merece un puesto al lado de "Sí, acepto" y de "¿le gustaría trabajar con nosotros?" (de mi actual trabajo).

John "Hannibal" Smith comentándoles el plan para sacar el Celebrity a los demás.

Se sentía el optimismo en el aire mientras esperábamos la grúa que iba a extirpar sacar el Celebrity del parqueadero, la espera se hizo larga pero al final escuché un motor diésel subiendo por la cuesta, no podía verlo pero de pronto como un gran espejismo apareció, un Mitsubishi Fuso Canter color blanco era el escogido para la tarea (así debió sentirse Jon Snow cuando estaba perdiendo contra Ramsay Bolton y llegó Sansa al rescate con tremendo ejercito), su conductor se estacionó enfrente y cuando se disponía a remolcarlo el nuevo dueño preguntó por las llaves, la idea era no romper el seguro de la transmisión automática pues era posible que la reinterpretación moderna de Los Magnificos requiriera un carro que al menos pudiera rodar, miré a mi esposa y su cara lo dijo todo, aunque ella las buscó desesperadamente no las encontró, siete años de historia las habrían refundido o estarían en el reciclaje.

El desespero se apoderó de nosotros y ya caía la noche, en ese momento el amigo de mi esposa decidió llamar a un cerrajero, tengan en cuenta: sábado por la noche con festivo incluido en el fin de semana, increíblemente no tardaron en llegar, al parecer las cosas en el mundo del cine se mueven en una escala de tiempo 100x.

Como si fuera una escena de "60 segundos", los cerrajeros entraron al Celebrity y con un par de ganzúas intentaron desbloquear el cilindro de encendido, pasaron 60 segundos y nada, algunos minutos más pero el cilindro no quería ceder, afortunadamente para Nicolas Cage nunca trataron de robarse un Celebrity en esa película, aunque de haberlo logrado tampoco hubiese sido buena idea escapar de un BMW 540i en el Celebrity (ni que fuera un Shelby Mustang del 67); momentos después procedieron a desmontar el timón y desarmar la columna de dirección, y de pronto el cilindro de encendido volvió a girar y el selector pudo ponerse en N. Las ruedas giraron y por fin el Celebrity subió a la plataforma de la grúa.

La historia tuvo un final feliz, ahora hay un espacio disponible en el garaje, ya no se tendrán que pagar más impuestos por un pisapapeles, y el Celebrity va a cumplir su sueño de salir en televisión (bueno eso último fue un poco exagerado pero suena bien), mi esposa es feliz, yo soy feliz, el nuevo dueño se encartó es feliz, por cierto si alguna vez dejan un vehículo sin encender el motor durante un tiempo prolongado aquí les dejo unos tips que les pueden servir para devolverlo a la vida:

Si es por un mes o un par de meses:

• La batería pudo haberse descargado, lo mejor es un revisar con multímetro que al menos dé 12 voltios, un proceso de recarga lenta o iniciarlo con ayuda de un jump starter es lo mejor si no se tiene otra batería a la mano.
• Si es un vehículo con caja mecánica, también se podría levantar una de las llantas que llevan la tracción (primero asegurar muy bien con freno de mano si es de tracción delantera y con tacos en las demás ruedas si es de tracción trasera), poner el carro con el cambio más largo (cuarta, quinta o sexta) y rotar la llanta que está en el aire hacia adelante algunas veces, primero muy despacio y al cabo de unas vueltas con más rapidez, esto va a hacer que algo de aceite lubricante recorra los circuitos de lubricación y al encender el motor no haya tanto desgaste.
• Si no hay problema con la batería lo mejor es abrir el switch de encendido hasta que se prendan todas las luces del tablero pero sin encender el motor, al cabo de 5 segundos cerrar el switch, esperar unos 30 segundos y volver a abrir el switch, esto es para que la bomba de gasolina funcione y restablezca la presión del combustible en el riel de inyección. Si es un motor diésel con "trampa" de combustible, podría ser necesario realizar el proceso de purga y presionar el botón que tiene para rellenar algo de combustible dentro del filtro-trampa.
• Los discos de freno pueden haber acumulado óxido durante ese tiempo, las distancias de frenado pueden alargarse considerablemente mientras las pastillas van "limpiando" el disco, tenga cuidado al recorrer los primeros kilómetros.
• Si es de caja mecánica, presionar el clutch varias veces y hacer varios cambios antes de encender el motor, luego hacer lo mismo antes de arrancar, así comprobamos que todo esté en orden y ayudamos un poco a la lubricación de la caja.
• Revisar la presión de las llantas, de seguro se habrá reducido bastante.

Si es por alrededor de un año:

• Aparte de lo anterior es necesario agregar gasolina fresca al tanque de combustible (de ser posible unas dos partes de gasolina fresca por cada parte de gasolina "vieja" que haya), la gasolina se va deteriorando con el tiempo, si la alimentación del motor es por carburador vendría bien agregar un poco de gasolina directo al carburador, si es de inyección hacer varias veces el proceso de abrir y cerrar el switch descrito anteriormente.
• Si es posible, se deben quitar las bujías, limpiarlas, y agregar máximo unos 3 ml de aceite de motor con una jeringa a través de los orificios de la bujía, tratando de apuntar hacia las paredes del cilindro, luego mover una de las llantas de tracción (si es de caja mecánica) como fue descrito anteriormente. Hay que tener cuidado de no agregar mucho aceite pues este no se comprime dentro de la cámara de combustión y podríamos terminar con un daño a las bielas o válvulas.
• Importante el tema de los frenos, por el óxido, pero también porque después de un tiempo el líquido de frenos habrá absorbido mucha humedad (es higroscópico), habría que cambiarlo pronto.

A todo el equipo mil gracias, y larga vida al Celebrity en su nueva carrera frente a las cámaras.

El equipo que lo hizo posible, gracias, ¡son grandes!