Viene de aquí:
En marzo de 1449, el mayor ejército otomano visto en Europa hasta entonces irrumpía por el este y marchaba directamente hacia la fortaleza de Kruje.Aunque la cifra de los cronistas de la época de 150.000 soldados en sin duda exagerada, se trataba de un ejercito enorme, que no pudo ser detenido a base de emboscadas durante la ruta.
Murat II.
Skanderbeg reforzó las defensas de la fortaleza de Kruje y encomendó su defensa al conde Vrana, colocándolo al mando de la guarnición de la fortaleza, unos 4.000 hombres entre los que había italianos, franceses, alemanes, etc
Skanderbeg tomo el grueso de su ejercito y marchó hacia la ciudad de Svetigrad, primer objetivo del sultan turco Murat.Si Kruje era la capital del nuevo estado de Albania, Svetigrad eran sus puertas.
Los defensores de Svetigrad (antigua Uscana romana,actual Kicevo, en Macedonia) lucharon valerosamente,ayudados por las incursiones de la caballería de Skanderbeg sobre las líneas de aprovisionamiento y la retaguardia otomana. Pero fue un espejismo, el ejercito turco era demasiado grande, y la fortaleza cayó tras unos meses de asedio, aunque en circunstancias desconocidas (parece que los turcos sobornaron a un soldado de la guarnicion para que arrojara un perro muerto al pozo de agua del que se surtía la fortaleza,obligando a la guarnicion a la rendición).
Con la conquista de Svetigrad,los turcos se aseguraban un pasillo seguro hasta Kruje.Pero ya era pleno verano, y el sultán optó por dejar una guarnición de jenízaros en Svetigrad y volver con su ejército a Adrianopolis,dando por finalizada la campaña de ese año 1448.
Al año siguiente, Murat se dirigió directamente sobre Kruje con otro ejército de 100.000 hombres y algunas novedades técnicas, con los zamburak, pequeños cañones sobre las jorobas de sus camellos (quizás el principio de la artilleria autopropulsada ? :):) ).
Zamburak.
Aparte, el ejercito otomano llegó frente a las murallas de Kruje con cañones capaces de lanzar proyectiles de entre 90 a 250 kilos de peso.
Skanderbeg dejó de nuevo al conde Vrana al cargo de la fortaleza y marchó a las montañas, para seguir acosando a su enemigo con su caballería.
Tras dos semanas de intensísima preparación artillera, los proyectiles turcos lograron abrir brecha en las poderosas murallas de Kruje.Se ordenó el asalto general, pero, mientras el grueso del ejercito otomano pugnaba con los defensores por acceder al interior de la fortaleza,Skanderbeg aprovechó para lanzarse con su caballería sobre el campamento turco, desmantelando el ataque otomano por completo.
Dos intentos más de asalto general se produjeron en las siguientes semanas,de nuevo rechazados por los defensores de Kruje y la caballería de Skanderbeg, a pesar que el sultán había desplegado grandes contingentes de infanteria e incluso artilleria en la dirección por la que siempre atacaba la caballeria albanesa.
Pero Skanderbeg siempre sabia por donde atravesar las lineas turcas, ya que tenía un buen grupo de espías en el campamento turco. Estaba emboscando a quien quería emboscarle y asediando a los asediadores de Kruje.
Tras seis meses de asedio, de nuevo llegó el verano y el fin de la “temporada” de guerra, y el sultán Murat y sus tropas desanduvieron el camino y volvieron hacia Adrianopolis.En Kruje, tras una semana de celebraciones por la victoria, toda la población de la zona se esforzó en reparar las muy dañadas murallas.
Pero ya no iba a haber necesidad para ello, ya que el sultán Murat murió de apoplejía en enero de 1460, sin haber conseguido tomar Kruje ni separar la cabeza de Skanderbeg de su cuerpo. El nuevo sultan, Mehmet II, habia estado junto a su padre frente a los muros de Svetigrad y Kruje, y estaba ansioso por castigar debidamente a Skanderbeg por sus repetidas humillaciones causadas a la Sublime Puerta.
Pero Mehmet tenia otras prioridades, como tomar Constantinopla en 1453 y capturar las ricas tierras de Serbia y Bosnia, llegando hasta Hungría y los territorios propiedad de los Hansburgo.Esta circunstancia dio un respiro a los albaneses, aunque los turcos nunca dejaron de intentar la conquista del país por otros métodos.
Incursiones de caballería sobre las localidades fronterizas, sobornos para los renegados ,y grandes ejercitos fueron enviados contra Skanderbeg , liderados por renegados albaneses conversos al islam como Balavan Pasha o Haza Kastriotti, sobrino de Skanderbeg.
Pero, aunque Kruje continuo resistiendo todos los intentos otomanos y las montañas eran posesión de Skanderbeg y sus soldados, las llanuras iban siendo controladas por los turcos, que establecían potentes guarniciones y construían fortalezas.
El ejercito del sultán Mehmet II volvió de nuevo a intentar tomar Kruje, pero tras tres meses de asedio debió retirarse, una vez más. Al siguiente año, el sultan ponía a la cabeza de su ejercito al renegado Balaban Pasha.Skanderbeg bajó de nuevo de las montañas para acudir en ayuda de Kruje, y derrotó a las tropas de Balaban, que se suicidó incapaz de resistir la humillación.
Skanderbeg no terminó su vida en un campo de batalla, como podía ser previsible. Murió de malaria, a primeros de 1468 en la fortaleza de Lezhe,mientras intentaba formar una nueva coalición de pueblos eslavos cristianos para oponerse a la prevista nueva invasión otomana.
La fortaleza de Kruje continúo resistiendo sucesivos ataques turcos durante una década, hasta que en 1477 la falta de alimentos y agua obligó a la guarnición a rendirse.El mismo año, los turcos conquistaban Lezhe, y en su catedral, profanaron la tumba de Skanderbeg y se llevaron sus huesos, con la esperanza de adquirir la valentía y el éxito que el líder albanes había obtenido.
Mausoleo de Skanderbeg,en Lezhe.
Quizás en parte gracias a esos amuletos, los turcos ocuparon Albania durante 4 siglos. Pero cuando el espirito de liberación del pueblo albanes resucitó lo hizo bajo los colores del estandarte de Skanderbeg: un águila negra bicéfala sobre un fondo de rojo sangre, colores que desde su liberación del poder otomano aun mantiene, con algunas variantes o añadidos, la bandera del estado albanes.
Agents of empire: Knights, corsairs, Jesuits and spies in the 16th century Mediterranean world – Noel Malcolm.
Cambridge medieval history, volume VII, 1415-1500 – Christopher Allmand